Las democracias socialistas siempre reparten pobreza y miseria. Y al ritmo que seguimos eligiendo políticos que desean mantenerla, la miseria se entronizará, ¿podremos hacer algo?... |
Camine por las calles de
cualquier ciudad de Chile y se encontrará con afiches y eslóganes como “La
única alternativa”, “Siempre contigo”, “Trabajo para usted”, “El futuro está
conmigo”, “Una nueva participación”, etc. Cada nueva elección significa una
nueva avalancha de ofrecimientos de los candidatos que ya no llama la atención,
¿de dónde viene este comportamiento, infantil y estúpido, de ofrecer lo que
saben que no podrán cumplir?.
LA DEMOCRACIA SOCIALISTA…
Los países más avanzados
del mundo han tenido, en las etapas más relevantes de su desarrollo,
democracias liberales, conformadas por personas de liderazgos basados en iniciativa,
cultura y mucha responsabilidad. Este sistema político fue el sustento del
sistema de libre mercado, único sistema generador de riquezas y de crecientes
niveles de bienestar. Pero, también, de crecientes desigualdades que se
manifestaban en que algunos pocos disponían de mejor bienestar que las
mayorías.
Por eso, el éxito de este
sistema fue la razón de que el germen socialista haya penetrado en la sociedad
con el mensaje de que la citada “desigualdad es indeseable”. Suena lógico: la
desigualdad es una injusticia que no se puede aceptar. Y esta ha sido la llave
del ideario socialista que le ha permitido penetrar en las mentes de las
personas por medio del mensaje de que se debe modificar la situación
interviniendo el sistema, motivo por el cual se requieren que los políticos
tengan el mismo pensamiento y creencias basados en la igualdad.
Al final, se ha generado un
sistema democrático intervenido por la lógica socialista, mediante la cual el
progreso humano puede ser dirigido por los políticos que disponen del poder. Es
decir, hemos construido democracias socialistas, burócratas, paternalistas y
que desincentivan la iniciativa individual como motor de cambios, mientras la
élite política dispone de más espacios discrecionales de poder para aumentar su
patrimonio y riqueza. El político deshonesto es el resultado de este tipo de democracia
(para más detalles favor revisar en nuestro sitio http://panoramaliberal.blogspot.com/2012/10/politica-un-decalogo-para-reconocer-un.html.).
LA DEMAGOGIA DE LA CLASE POLÍTICA…
Mucha gente tiene la
percepción de que las cosas mejorarán solo con el cambio de los liderazgos, sin
considerar el sistema en que están insertos. Es un voluntarismo inútil basado
en la percepción de que los políticos
tienen un peso específico y una importancia que no tiene correlato con la
realidad. Es más, se les concede demasiada importancia para lo que efectivamente
hacen.
La democracia socialista
ha construido Estados enormes, asumiendo responsabilidades que están más allá
de sus posibilidades reales, para lo cual requiere de personajes que estén
dispuestos a continuar con ese discurso voluntarista, pese a que saben con
absoluta certeza que no lograrán lo que prometen. Este es el caldo de cultivo
de los políticos mesiánicos, personajes que tienen la absurda creencia de que son
más dotados que cualquier otro ciudadano para imponer sus letanías.
Por lo tanto, la democracia
está en problemas debido al carácter mesiánico que han adoptado los políticos
desde hace mucho tiempo. En su afán de alcanzar el poder han usado la demagogia para capturar votantes y se han
transformado en verdaderos apóstoles y magos porque ofrecen las maravillas más
grandes del mundo de forma gratuita y sin costo. Por ejemplo, Chávez es un
demagogo porque entrega servicios y productos gratuitos a la población a cambio
de pervertir su espíritu de iniciativa y de trabajo, financiado gracias a la
riqueza natural del petróleo, y solo con eso, votan por él.
ESTE TIPO DE POLÍTICOS SOCIALISTAS…
Nos ofrecen que cambiarán
el mundo porque los actuales son unos ineptos e incapaces…
Parecen buenas personas, algo
ingenuas, transmitiendo la impresión de que no saben que ellos son un engranaje
más de una enorme maquinaria diseñada para funcionar y moverse lentamente…
Sin embargo, la mayoría son
personas hábiles y astutas buscando solo fuentes de ingreso adicionales porque
ya tienen claro que en política se lucra y mucho…
Por eso, han armado un
tinglado legal por medio del cual desincentivan a un ciudadano común y
corriente para llegar al poder…
Al final, saben que nada
podrán hacer en tan breve lapso de tiempo, excepto acceder al poder generador
de atractivos retornos financieros. Por eso, vemos a ex deportistas, artistas,
modelos, actores, etc., cualquier persona medianamente conocida, postulando a
cargos intrascendentes con la esperanza de hacer carrera para mejorar su propio
bienestar. Es su única motivación.
¿Cambiar el mundo?,
¿ayudar a otros?, ¿justicia social?
¡A otro perro con ese
hueso…Solo busco mi propio beneficio!
De esta manera se profundiza
el nefasto sistema, que hemos denominado democracia socialista, porque a los
actuales políticos y a los que llegarían, solo les interesa mantenerlo o
profundizarlo porque eso los beneficia enormemente. Nada de cambios que signifiquen
reducir beneficios y regalías…
Y la única solución es
ver a ciudadanos comunes y corrientes en las instancias de poder de manera
temporal para que luego puedan volver a sus trabajos habituales. Parece un
sueño, pero no queda más que soñar ante la podredumbre en que se ha
transformado la noble actividad política debido al actuar interesado de la propia
clase política.
PANORAMA Liberal
Domingo 14 Octubre 2012
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