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| ¿Tienen vacaciones los diputados? |
Hace
un poco tiempo atrás nos enteramos que la esposa del diputado Osvaldo Andrade
es una espléndida empleada pública que disfruta de un generoso sueldo
asesorando una institución pública, mientras este generoso socialista percibe
sabrosas dietas y engorda con cargo al fisco. Y ahora este generoso socialista ha
presentado un proyecto que busca eliminar cuatro feriados, tres de ellos
religiosos (San Pedro y San Pablo, Asunción de la Virgen e Inmaculada
Concepción) y uno civil (el 12 de octubre, Día de la Raza), para agregar cinco
días más al período legal de vacaciones de las personas asalariadas.
Y
cuando le preguntaron, este generoso socialista manifestó que “los diputados no tenemos vacaciones. Los
diputados no nos regimos por el Código del Trabajo. No tenemos empleador. Lo
mismo pasa con los trabajadores independientes…”.
Las
afirmaciones de este socialista son inaceptables. En primer lugar, formalmente
los diputados no hacen nada durante el mes de febrero y la cuestión que debiera
responder es: en realidad, ¿trabajan estos sujetos para que merezcan vacaciones?.
En segundo lugar, siempre el que paga es el empleador, y en este caso, el
Estado de Chile les paga generosamente a nombre de los votantes. Por lo tanto, los
ciudadanos somos los empleadores de estos sujetos.
Con
esta afirmación de Andrade podemos darnos cuenta que estos tipos se consideran a
sí mismos por sobre el bien y el mal, para hacer lo que les venga en gana…
Por
último, Andrade terminó sus dichos indicando que en dichos feriados “lo que sí le puedo garantizar es que en
algún momento todos llegan al mall a comprar. Devotos o no devotos”…
¿Y
qué le importa a este sujeto lo que hacen las personas con su tiempo libre?.
Con esta afirmación muestra a las claras su profundo desinterés en la libertad
individual de las personas…¿podremos esperar algo distinto de un sociales como
este?
La
familia de estos funcionarios públicos vive en condiciones superiores a
cualquier familia chilena promedio, solo por el simple hecho de que los votaron
para ciertos cargos. Sin embargo, no tienen derecho a seguir reduciendo
espacios de bienestar individuales por mero capricho…
Usted,
querido lector, ¿desea que este señor Andrade continúe metiéndose en nuestras vidas
privadas mientras disfruta la propia con el dinero de todos los contribuyentes?
Panorama LIBERAL
Sábado 20 Diciembre 2014
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