John Barry nació en York, norte de Inglaterra, un 3 de noviembre de 1933, y acaba de fallecer este 30 de enero de 2011 a la edad de 77 años.
Era hijo de una pianista clásica y de un dueño de salas de cine y de teatro en Lancashire y Yorkshire. No es de extrañar, entonces, que en ese entorno se desarrollara un talento como pocos. Además, estudió en un colegio católico que fue bombardeado durante la Segunda Guerra Mundial y en el cual murieron varias monjas y algunos compañeros de Barry. En el servicio militar tocó la trompeta en una banda y ese es su real inicio como creador puesto que allí aprendió a hacer arreglos.
En 1957 fundó el grupo The John Barry Seven, muy jazzístico, y a finales de esa década empezó a componer para el cine combinando cuerdas y vientos causando furor con su estilo, moderno para la época.
Para recordarlo, revisaremos algunas de sus brillantes creaciones. Comenzaremos con Bond, James Bond.
Para el tema que presenta a James Bond, los productores llamaron a John Barry, que añadió la guitarra y le dio el tono jazz característico de la serie y componiendo 11 de las primeras 14 bandas sonoras de la serie del agente secreto menos secreto del mundo.
Fue, por ejemplo, el primero que usó sintetizadores para la gran pantalla (Al servicio secreto de su majestad).
Creó la música de Africa Mía, Robert Redford y Meryl Streep, ambientada en la africana sabana del Serengeti.
Creó la brillante música de Danza con lobos que re-mira la conquista del lejano oeste norteamericano.
Creó la música de Cowboy de medianoche
Creó la música de El león en invierno
Creó la música de Nacida libre
Estas creaciones seguirán viviendo en aquellos que disfrutamos con dichas películas. La creación siempre es un acto personal, e individual, pero del cual muchos pueden seguir disfrutando.
John Barry nos dejó un gran legado que no olvidaremos y desde la lejanía le deseamos un muy buen viaje. Pronto nos reencontraremos.
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