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jueves, 14 de octubre de 2010

NÚNCA MÁS...¿NÚNCA MÁS?

Una vez terminado el rescate comienzan el debate en una serie de aspectos relevantes de examinar, y uno de ellos es la legislación laboral. Así, Piñera manifiesta que “se revisará la legislación laboral”.

¿Qué significa “revisar la legislación laboral”?

Piñera indica que "nadie puede garantizar que no hayan más accidentes en nuestro país…pero podemos garantizar que nunca más vamos a permitir en nuestro país que se trabaje en condiciones tan inseguras y tan inhumanas como en la mina San José y en muchos otros lugares…En los próximos días vamos a anunciar al país un nuevo trato con nuestros trabajadores y trabajadoras...Vamos a poner en la cultura y el corazón de nuestro país el respeto por la vida, la seguridad, la dignidad y la salud", indicó.

¡Y muchos estábamos seguros que nuestras autoridades del pasado se habían preocupado del estándar laboral de nuestros trabajadores¡

¿Qué hicieron nuestras autoridades políticas del pasado?. Al parecer, nada. Hoy, Piñera sostiene que "vamos a revisar la legislación. Vamos a cambiar muchos procedimientos y estándares. Vamos a adoptar en plenitud los estándares de los países desarrollados". Sin embargo, debemos cuidarnos del lenguaje y ser cautos respecto de las medidas que se puedan tomar dado que Chile es un país subdesarrollado y de escasos recursos.

¿Debe desaparecer la minería del pirquinero?

Podemos presumir razonablemente que la minería del pirquinero de la tercera región va a desaparecer producto de este evento. Y con su desaparición, desaparece la única fuente de ingresos de muchas personas…¿Cómo podemos equilibrar ingresos con seguridad laboral en un ámbito tan precario?. Es cierto, que el Estado deberá aumentar la fiscalización, pero ¿deberá el Estado hacer aportes en el ámbito de la seguridad, también?. Insisto: los pirquineros y la pequeña minería no tiene los recursos para equilibrar seguridad con ingresos.

La minería es una profesión riesgosa que con los adelantos y la inversión en seguridad permite minimizarlos, pero cuando pase todo este impacto mediático, comenzará la presión para operar ciertas minas a su cuenta y riesgo, ¿Qué debe hacer la autoridad?, ¿seguir prohibiendo o permitir operarlas bajo su cuenta y riesgo?.

El tema de la responsabilidad individual

Lo anterior nos lleva a la responsabilidad individual que los trabajadores deben asumir al momento de ejercer un oficio. Es cierto que se trabaja por un ingreso, pero a nadie lo obligan a ejercer un oficio en condiciones riesgosas, por lo que las personas que lo hacen deben asumir su cuota de responsabilidad –o de irresponsabilidad- y dejar de culpar a terceros de sus decisiones.

Es cierto, en primer lugar, la responsabilidad recae en la empresa y sus propietarios, los que deben enfrentar las complejidades judiciales de sus omisiones.

En segundo lugar, no debemos olvidar que los otros responsables son los mismos trabajadores que decidieron enfrentar los riesgos, mientras otros se retiraban, y trabajar bajo dichas condiciones. Algunos, se escudan en la ignorancia y desconocimiento, pero su responsabilidad es clara. Y no debe dejarse de lado.

Finalmente, en tercer lugar, el Estado debe establecer una legislación que permita operar las instalaciones mineras bajo condiciones mínimas de seguridad, y fiscalizar bajo estándares que se ajusten a nuestra realidad, porque ¿podría un pequeño minero operar si le fijamos estándares de seguridad inalcanzables?

Ha terminado el rescate de los mineros y comienzan los debates en muchos ámbitos. Uno de ellos es el conflicto entre “Mayor Seguridad y Más Trabajo” que desafortunadamente no van de la mano. Así, puede darse la situación que en 6 meses más veamos una huelga de hambre de estos mineros solicitando la apertura de sus fuentes laborales cerradas por falta de seguridad…

Hoy dicen “nunca más”…¿núnca más?.

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